Uno de los elementos de mobiliario fundamentales en un living, además del sillón, sin lugar a dudas, es la mesa ratona o de centro. Su uso no se reduce simplemente al aporte de su estética en el diseño, sino que su contribución es también funcional.
Al ser centro de atención de aquel ambiente es importante que refleje los gustos personales y el estilo que se desea transmitir allí. Y no solo se deben cuidar los materiales con los que está fabricada, sino también sus formas con las que se va a acentuar el aire que respirará el ambiente. Una mesa circular o mesas nido ayudarán a que el ambiente se sienta más relajado y moderno, mientras que una mesa cuadrada o rectangular hará que luzca más clásico.
Sin embargo, para que la mesa ratona guarde coherencia con el resto del espacio es sumamente clave prestar atención a los elementos decorativos que elijamos para que se exhiban en ella. De esta manera, lograremos un ambiente en el que cada pieza que se encuentre en ese lugar estará en armonía con los otros elementos, y así tendremos como resultado un lugar que nos ofrezca calma y relax.
Colocar una bandeja
Una excelente idea para decorar una mesa de centro es sumar una bandeja. Ella nos da la posibilidad de agrupar, y que varios elementos se vean como una sola unidad, logrando que haya más orden y que no sean simplemente piezas desparramadas sobre su superficie.
Además, cuenta con la ventaja de que cuando se precise despejar la mesa para armar una picada con amigos, por ejemplo, simplemente solo se deba levantar.
Existen varios modelos que ya son un elemento decorativo por sí solo, como las de mármol, las espejadas, de madera tallada, de ratán o de mimbre.
Usar el triángulo visual
Para romper con la monotonía de los objetos, tanto si se encuentran sobre la mesa de centro, o contenidos en una bandeja, es aconsejable hacer uso de la técnica del triángulo visual.
Esta herramienta realiza composiciones de elementos decorativos impares, asegurándose que cuenten con distintas alturas para generar una ilusión óptica muy interesante. De esta manera se logran agrupar objetos como jarrones, velas, u objetos de arte para que se vean como un conjunto.
Sumar cajas
Existen algunos objetos de nuestra rutina diaria que no resultan particularmente estéticos, pero sí necesarios para tener a mano en cualquier momento. El control remoto para la tv o el equipo de música, y los posavasos, son algunos ejemplos de elementos que deseamos esconder cuando no se encuentran en uso.
Para ello es realmente útil contar con cajas con tapa en las que se puedan depositar esas piezas, y que cuenten con un diseño que añada más estética a la decoración de la mesa ratona.
Al igual que las bandejas, según el estilo predominante, se podrán elegir de madera, espejadas, mercurizadas, de vidrio, y de fibras naturales como el ratán o el mimbre.
Hacer una selección de libros
Otro de los elementos decorativos que se utilizan mucho para decorar una mesa de centro son los libros de decoración. En realidad, puede tratarse de cualquier temática que sea de tu interés, ya que es una buena manera de demostrar cuáles son tus preferencias.
Ya sea un libro sobre arte, fotografía, arquitectura o viajes, lo que se debe cuidar es que las tapas resulten atractivas como para dejarlas a la vista, mas allá de que su contenido nos identifique.
Que no falten plantas
Pequeñas macetas con plantas, o jarrones o floreros con flores frescas o secas, siempre serán un gran acierto para contribuir a que los espacios luzcan más naturales y para traer un poco de la frescura y la alegría que nos brinda la naturaleza.
Ramas de flor de cerezo en un jarrón, o una orquídea en maceta, son las opciones que más se pueden ver actualmente decorando las mesas de centro.
Añadir objetos de arte
En una mesa ratona seguramente habrá varios de los elementos arriba mencionados, pero se aconseja también agregar algún objeto con forma escultural que llame la atención.
Un candelabro, o una pequeña escultura de madera o de cerámica, seguramente causarán un gran efecto y atraerán todas las miradas con lo llamativo de sus figuras.
Y otra pieza hecha artesanalmente, como puede ser una vasija, resulta también una buena alternativa al regalarnos la belleza que ofrecen los objetos perfectamente imperfectos, que tanto se veneran hoy en día.
No exagerar
Es necesario que se realice una selección de todos estos elementos y no pretender tener todos exhibidos ya que no es conveniente que la mesa de centro se encuentre repleta de objetos.
Es mejor elegir los que más nos gusten, según lo que sentimos que más nos representan, y jugar con ellos para hacer una combinación ideal.
Además, siempre hay tiempo para ir cambiando los elementos de lugar y elegir otra ubicación dentro de la casa, para poder ir renovando el sitio y la energía del lugar. Aunque nos sintamos atraídos por una composición que hayamos logrado está bueno jugar con los componentes con los que contamos en el hogar e ir probando nuevas combinaciones.
